Cáncer de Pulmón
El tabaquismo es responsable del 65% de las muertes por cáncer de pulmón en el mundo. En Colombia, cerca de 5 mil muertes anuales por cáncer de pulmón son atribuibles al consumo de tabaco[1].
El 90% de esas muertes atribuibles al tabaco podrían evitarse si los fumadores dejan de hacerlo antes de alcanzar la mediana edad.
El tabaquismo es un factor de riesgo oneroso para nuestro sistema de salud. Y los costos de cáncer de pulmón representan el 8.5% de los costos sanitarios atribuibles al consumo de tabaco en nuestro país[2].
Por esta razón, el aumento de impuestos es la medida más eficaz para combatir los efectos devastadores del cáncer de pulmón. Los países que adoptan incrementos fuertes a los impuestos a productos de tabaco logran: incentivar la cesación y evitar que jóvenes inicien.
Bogotá, D.C. 17 de noviembre de 2020. Según el Observatorio Nacional de Cáncer, el cáncer de pulmón es uno de los cánceres más comunes en el mundo, ubicándose globalmente como el primero en número de casos nuevos. En Colombia hombres y mujeres presentan 5.856 casos al año[3] siendo más frecuente entre los hombres que entre las mujeres. Este tipo de cáncer se constituye en una prioridad de salud pública cuya principal causa es el consumo de tabaco.
Durante el día mundial de cáncer de pulmón, la Liga Colombiana Contra el Cáncer junto a la Fundación Anaás, bajo su campaña #RelaciónTóxica, hace un llamado para promover una conciencia sobre el daño que produce el consumo de tabaco en el cuerpo del ser humano.
Conozca los signos, síntomas y tratamientos del cáncer de pulmón
Según la OMS, aproximadamente 7 millones de personas mueren al año por enfermedades asociadas al consumo, y más de 890.000 personas no fumadoras están expuestas a humo de tabaco. “Su consumo está creciendo en forma constante, sobre todo entre la población adolescente”, asevera Bautista.
En Colombia, los departamentos con mayor número de personas diagnosticadas con este tipo de cáncer anualmente son: Antioquia, Cesar, Risaralda, Quindío, Valle del Cauca y Caldas. Estos son coincidentes con la distribución de la prevalencia de consumo de tabaco a nivel territorial.[4]
Durante la pandemia, los pacientes de cáncer presentaron una mayor vulnerabilidad y probabilidades de presentar cuadros graves.[5]
De acuerdo al Plan Decenal para el Control del Cáncer 2012-2021 –PDCCC y su línea estratégica, estos son algunos de los aspectos trazadores para el control de esta y otras tipos de cáncer asociadas a los modos condiciones y estilos de vida.
- Lograr el cumplimiento de los convenios internacionales vinculantes y ratificados por el Gobierno colombiano relacionados con el control del consumo de tabaco.
- Disminuir la prevalencia de consumo de tabaco en jóvenes escolares de 13 – 15 años por debajo del 21,8 %.
- Disminuir la prevalencia de consumo de tabaco en jóvenes de 16 – 18 años por debajo del 17,36 %.
- Posponer la edad de inicio de consumo de tabaco en los adolescentes colombianos por encima de 14 años.
- Disminuir la prevalencia de tabaquismo en adultos de 18 a 69 años al 10 % en los próximos 10 años.
- Garantizar el cumplimiento de ambientes 100 % libres de humo de tabaco y sus derivados a nivel nacional, en los lugares definidos por la Ley 1335 de 2009.
- Aumento del 100% en impuestos indexados al Índice de Precios al Consumidor y al Producto Interno Bruto para los productos de tabaco y sus derivados, antes del 2021.
- Aumentar a un 70% el tamaño de la advertencia sanitaria en las cajetillas de los productos de tabaco comercializados en el territorio colombiano antes del 2021, en consonancia con lo dispuesto en el Convenio Marco para el control del tabaco de la Organización Mundial de la Salud.
“El tabaquismo es un factor de riesgo oneroso para nuestro sistema de salud. Y los costos de cáncer de pulmón representan el 8.5% de los costos sanitarios atribuibles al consumo de tabaco en nuestro país.[6] Los impuestos están en primera línea entre las medidas que son urgentes. La obligación del Estado no es sólo garantizar acceso oportuno a tratamiento y a detección temprana. También debe ofrecer entornos protectores para la población, evitando su exposición al principal factor de riesgo de este flagelo y el principal escudo son los impuestos altos” afirma el Dr. Carlos Castro, Director Médico de la Liga.
Firma Declaración de Bogotá, 4 de diciembre de 2019 donde los principales líderes en cáncer de América Latina se fijaron los objetivos para prevenir el cáncer en la región.
En este momento se discuten dos propuestas de impuestos al tabaco en el Congreso que ofrecen una oportunidad real de frenar los casos de cáncer de pulmón en el país. El proyecto de ley 365 de 2020 propone triplicar su nivel actual, y este es un aumento necesario, porque definitivamente Colombia aún está entre los países con cigarrillos más baratos en la región. Ya se ha logrado avanzar desde 2016, pero no es suficiente frente a la dimensión del desafío que nos plantea el tsunami de cánceres que enfrentaremos en los próximos años.
Otra propuesta sobre ajuste del impuesto está incorporada en el proyecto de Ley de reforma a la salud. Si bien se encuentra orientada en la dirección correcta, se queda corto en el tamaño incremento. “De acuerdo con nuestras estimaciones, si el Congreso aprueba triplicar el impuesto, evitaría 7500 muertes por cáncer de pulmón en los próximos 20 años”, afirma Blanca Llorente, miembro del grupo de investigadores del Consorcio Global de Economía del Tabaco (GTEC).