“Tócatelas antes de que te duelan”.
Cáncer de Testículo
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El cáncer es un grupo de enfermedades en las que se encuentra un crecimiento o multiplicación descontrolada o desorganizada de las células del cuerpo.
Recuerda que el cuerpo humano se encuentra compuesto por millones de células especializadas en funciones específicas para los procesos vitales. Las células son la unidad básica de la vida, tienen la capacidad de crecer y dividirse dando origen a nuevas células y morir de manera organizada cuando ha terminado su ciclo. Por diversas causas puede suceder que estas capacidades se alteren y puede ocurrir que el proceso de multiplicación o crecimiento se realice de forma descontrolada o desordenada, por lo anterior puede aparecer una masa o tumor.
Si bien “El Cáncer Testicular es poco frecuente, es el tumor maligno sólido más común en hombres entre los 15 y 34 años” (Correa Ochoa, Velásquez Ossa, Lopera Toro, Martínez González, & Yepes Pérez, 2016), sobre esta premisa se desarrolla la Guía Colombiana de Cáncer de testículo y se hace un llamado a prestar atención a esta dolencia que no deja de ser relevante para el logro de los objetivos mundiales de control del cáncer. En Colombia se presentan 1369 casos nuevos cada año de acuerdo con el informe de GLOBOCAN 2020. (International Agency for Research on Cancer, 2020)
Factores de Riesgo
Un factor de riesgo en salud es una circunstancia o situación que aumenta la probabilidad de contraer o desarrollar alguna enfermedad. Debido a la baja frecuencia de la enfermedad, es corto el listado de factores de riesgo identificados, sin que se consideren como causas específicas para el desarrollo de cáncer, los estudios realizados han logrado relacionar las siguientes situaciones y circunstancias con la aparición de cáncer de testículo(8).
Factores de riesgo NO modificables
Edad, aunque puede afectar a hombres en cualquier edad, la mayoría de los casos se han evidenciado entre los 20 y 34 años de edad
Raza, se ha evidenciado mayor número de casos en hombres de raza blanca.
Antecedente personal de testículo no descendido conocido como Criptorquidea. Este es el principal factor de riesgo asociado al desarrollo de cáncer de testículo.
Historia familiar de primer grado, padre, hermanos, de tumor testicular.
Antecedente personal de infertilidad.
Infección por Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
Factores de riesgo modificables
Factores de riesgo asociados con la industrialización, se ha evidenciado que el mayor número de casos de cáncer testicular ocurre en hombres que habitan ciudades industrializadas por lo que esto pueden influir en el desarrollo de cáncer testicular.
Estrategias para prevención y detección temprana
Siendo este tipo de cáncer poco usual y contando con escasa evidencia de factores de riesgo el autocuidado y autoconocimiento se convierten en las principales estrategias para prevención y detección temprana.
Controlar factores de riesgo comunes a todos los tipos de cánceres que se han relacionado con la industrialización es una forma de gestionar el propio cuidado, el del grupo familiar y la sociedad. Esto se refiere a la adopción de estilos de vida saludable en los que predominan:
- Consumo de dietas saludables, balanceadas, nutritivas y naturales.
- Rutinas de ejercicio físico de acuerdo con el ciclo vital de cada persona.
- Conservación de peso adecuado para la talla y edad, peso sano.
- Alta moderación del consumo de alcohol.
- Eliminación del consumo de azúcares en alimentos procesados y bebidas gasificadas.
- Eliminación del consumo de cigarrillo.
El cáncer testicular es una enfermedad que presenta baja frecuencia en el país, predomina en varones entre los 15 y 35 años. El pronóstico de esta patología suele ser bueno siempre que su diagnóstico se realice a tiempo. Por eso es importante que los varones se familiaricen con la forma, tamaño y aspecto normal de sus testículos, lo cual les permitirá identificar cualquier cambio y consultar a tiempo.
Autoexamen de Testículo
Así entonces, en la DETECCION TEMPRANA la estrategia inicial es el autoconocimiento mediante la implementación apropiada de la técnica del autoexamen de testículo que se describe a continuación en tres pasos:
Observa la piel en busca de señales como enrojecimiento, engrosamiento, lesiones que no cicatricen o zonas de transparencia que pueden indicar inflamación. Revisa el aspecto general de los testículos, por lo general, aunque uno suele ser más grande y estar un poco más descendido que el otro, la diferencia es apenas perceptible, grandes desigualdades deben llamar tu atención.
Examina cada testículo por separado, tomándolo entre tus dedos índice, medio y pulgar. Haz girar el testículo entre los dedos aplicando de manera firme una presión leve. Debes estar atento a cualquier identificar deformidades o masas incluso del tamaño de un arroz.
Por detrás de cada testículo revisa el epidídimo, cordón que transporta el líquido seminal, no se deben sentir tumefacciones ni dolor.
Se recomienda realizarlo mensualmente, durante la ducha o después de ella cuando el escroto, la piel que recubre los testículos, se encuentra relajada.
¿Y después de esto?
No dudes en consultar si encuentras alguna irregularidad como:
- Cambios en la textura de la piel del escroto o aparición de lesiones
- Bultos, masas o tumefacciones en uno o ambos los testículos.
- Desigualdad notoria entre el tamaño o forma de los dos testículos,
- Acumulación repentina y permanente de líquido en el escroto, bolsa de piel que cubre los testículos,
- Sensación de pesadez en el escroto.
- Dolor sordo en el abdomen bajo o la ingle sin causa aparente.
- Dolor o molestia permanente en un testículo o en el escroto.
La aparición de uno o varios de estos síntomas puede estar relacionado con otras enfermedades y no necesariamente ser cáncer, por eso es muy importante la consulta con un profesional de medicina quien orientará el diagnóstico adecuadamente.
Diagnóstico del Cáncer de Testículo
El médico puede ordenar diferentes apoyos diagnósticos según la particularidad del caso uno de los más frecuentes es la ecografía, este apoyo de imagenología es indoloro y permite la identificación de masas.
Según la Guía Colombiana de Cáncer de testículo el diagnóstico de esta enfermedad se tarda hasta 5 meses a partir de los síntomas iniciales por retraso en la primera consulta y diagnóstico errado inicial. El desconocimiento y desinformación referente a este tema puede generar temores infundados o ideas erróneas que favorecen un diagnóstico tardío y con ello disminución en las probabilidades de curación. En estudios de la primera década (Cambil Martín, 2005) se afirmaba que “la mayoría de los hombres no están predispuestos a pedir consejo sobre una masa u otro síntoma testicular descubierto por ellos mismos. Esto puede provocar el retraso en la búsqueda de una opinión médica”. La falta de información o información errada, facilita la generación de mitos y temores infundados, hoy por hoy la tecnología permite superar estas barreras compartiendo enlaces de instituciones y profesionales calificados que pueden orientarle en la toma de decisiones.
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Referencias
Cambil Martín, J. (2005). Efectividad del autoexamen y del screening EN LA DETECCIÓN PRECOZ DEL CÁNCER DE TESTICULO. Index de Enfermería, 14(48-49), 33-36. doi:1699-5988
Correa Ochoa, J. J., Velásquez Ossa, D., Lopera Toro, A. R., Martínez González, C. H., & Yepes Pérez, A. (septiembre-diciembre de 2016). Guía colombiana de cáncer de testículo. Revista Urología Colombiana, XXV(3), 274-285. doi:0120-789X
International Agency for Research on Cancer. (2020). https://gco.iarc.fr/. Obtenido de GLOBOCAN 2018: https://gco.iarc.fr/today/data/factsheets/populations/170-colombia-fact-sheets.pdf
